Según psicólogos clínicos y terapeutas expertos en parejas, la forma en que duermes con tu amorcito dice mucho sobre vuestra relación. ¿Caéis en brazos de Morfeo con tu cabeza sobre su pecho o sois de los que apenas se tocan? ¿Os vais a la cama como si os hubiérais fundido en una sola persona, pero despertáis cada uno por su lado? Cuando duermes, tu subconsciente toma control de tu cuerpo, así que tu lenguaje corporal puede decir mucho de cómo te sientes hacia tu pareja. Aquí hemos recopilado lo que dicen los especialistas sobre varias posturas comunes de dormir en pareja. Pero recuerda: estas son interpretaciones, no diagnósticos. Si te preocupa algo de tu relación en concreto, háblalo primero con tu cónyuge.
1. Cucharita
Es una de las formas de dormir más populares gracias a estar tan comúnmente representada en películas y programas de televisión como la forma más romántica para dormir. Un estudio realizado en 2015 por la psicóloga Corinne Sweet señala que esta posición indica protección y comodidad dentro de la relación, además de ser muy sexual, por lo que les gusta a las parejas que están cómodas con su intimidad. La persona dada a ser la “cuchara grande” adopta un abrazo protector detrás de su pareja, mientras que a la “cuchara pequeña” le gusta sentir seguridad con su pareja. Sin embargo, esta forma de dormir se ve más en las parejas que están comenzando a construir su vínculo. De hecho, el estudio de Sweet concluyó que sólo 18% de las parejas la prefieren. Vamos, que en realidad al cabo de unas horas los brazos se acalambran.
2. Abrazo total
Otro clásico del romanticismo made in Hollywood. En esta posición, ambas personas se funden en un abrazo que involucra todo el cuerpo, ¡hasta las piernas! La pareja se convierte así en toda una enredadera de brazos y piernas. Pero, al igual que la cucharita, se trata de una posición adoptada principalmente por las parejas que comienzan con su relación. Es entendida como una posición transitoria antes o después de tener relaciones, la época en la que no pueden quitarse las manos de encima. El estudio de Sweet resalta que un escaso 2% de las parejas ya afianzadas duermen así. De hecho, encontró que quienes todavía lo hacen pasados los seis meses de relación pudieran tener problemas de dependencia. Así que no te preocupes si tú y tu pareja ya estáis en la etapa de querer un poco más de espacio en la cama. ¡Vais por buen camino!
3. Cara a cara
En esta posición, duermes frente a frente con tu pareja, con vuestras cabezas al mismo nivel y seguramente tocándose o abrazándose. Es una posición muy íntima y seguramente producto de que hablan cada noche hasta quedarse dormidos, lo que demuestra que tenéis muy buena comunicación. De hecho, dormir así pudiera interpretarse como que sois una pareja que valora la comunicación por encima de muchas otras cosas, lo cual es genial. Aunque debemos decir que no parece ser la más cómoda, pues es difícil dormir con alguien respirandote en la cara.
4. Separados, pero tocándose
Ésta es, según los especialistas, la forma más cómoda para dormir en pareja y la que señala que la relación es saludable. Se trata, simplemente, de que la pareja duerma dándose espacio, pero tocándose alguna parte del cuerpo; como agarrándose de las manos o juntando las piernas. También existe la variante en la que se duerme de espaldas, pero con los glúteos tocándose. Esto se interpreta como un deseo constante de cercanía, pero que a la vez se valora y respeta el tener un espacio personal saludable. Es una forma de decir “toma el espacio que quieras, pero aquí estoy si me necesitas”. Si dormís así, significa que confiáis el uno en el otro y que la relación tiene ya tiempo. Es, en pocas palabras, la evolución natural de la posición de “cuchara” inicial.
5. La cabeza sobre el pecho
Es una posición común en las parejas nuevas, una señal de confianza y protección. Se da cuando una de las personas duerme con su cabeza sobre el pecho de la otra. Esto genera una sensación de cuidado, apertura y compañerismo. La persona que duerme boca arriba es, generalmente, alguien con confianza que le envía un mensaje de protección a su pareja, mientras que quien apoya su cabeza en el pecho de su pareja aprecia la cercanía y el amor, aunque sigue siendo independiente. Es una posición que denota que la pareja es muy romántica y se encuentra unida. Bien es verdad que lo más común es que sea una postura inicial para quedarse dormidos, pero que acabéis moviéndoos durante la noche.
6. La “estrella de mar”
Se produce cuando una de las personas ocupa la mayoría del espacio en la cama, extendiendo sus brazos y piernas, mientras que la otra termina ajustándose al pequeño espacio a su alrededor. Dormir así puede interpretarse como un indicio de una relación en la que una de las partes es egoísta. Quien controla la cama probablemente controle la relación, y quien deba adaptarse es la parte de la pareja relegada a un papel más sumiso. Esta posición es tomada por la mayoría de los especialistas como una mala señal, por lo que se recomienda a las parejas que hablen sobre el tema y busquen una solución.
7. Sin contacto
Os vais a dormir, os dais un beso de buenas noches y os dais la vuelta, cada cuál hacia un lado: cerca, pero sin tocaros. También puede darse que tú te quedes bocarriba mientras tu pareja está de lado. Sea como sea, el punto es que no se tocan. Pero, descuida, no es tan malo como crees. De hecho, una encuesta realizada por Casper, una reconocida marca de colchones de Estados Unidos, esclareció que 46% de las parejas prefieren esta posición cuando la relación se encuentra ya en etapas más avanzadas. Y, en la investigación de Sweet, se aclara que dormir así de hecho indica que la pareja se siente conectada y segura, que puede compartir una cama mientras se es independiente, y eso es sano. Sin embargo, la distancia juega un papel fundamental. Si estáis demasiado separados, es decir, cada uno en el extremo opuesto de la cama, puede que exista un problema de comunicación o cercanía que será necesario abordar.
