Latinoamérica tiene varios lugares considerados místicos tanto por sus pobladores como por quienes los visitan. Acá reunimos para ti 7 espectaculares y enigmáticos sitios de la región. Prepara la mochila y lánzate a la aventura.
Salar de Uyuní (Bolivia)
¿Imaginas poder caminar sobre las nubes? En este lugar es casi posible hacerlo. Se trata de El Salar de Uyuni, el desierto de sal más grande del mundo, ubicado en Bolivia. Es un espectáculo sin comparación. El suelo se convierte en un espejo y no se distingue entre cielo y tierra. El llamado “Desierto de Dalí” es un escenario digno para ser poseído por el espíritu de la Pachamama. Si lo espiritual no es lo tuyo, al menos obtendrás fotografías de lujo.
Parque Nacional Emas (Brasil)
En el Parque Nacional de las Emas, en Brasil, existen inmensos nidos de termitas que te dejarán con la boca abierta al anochecer. Estas “torres” se iluminan con miles de lucecillas verdes. Se trata de unas larvas (crías) de escarabajos. La luz que emiten atrae a las termitas, que al acercarse son devoradas por las crías asesinas. La relación entre estas colonias de insectos genera interrogantes para la ciencia.
Líneas de Nazca (Perú)
En este conteo no podía faltar uno de los enigmas más grandes la humanidad, al punto de que hay teorías que atañen la obra a manos alienígenas. Se trata de las Líneas de Nazca, en Perú. Estos misteriosos dibujos hicieron de ese desierto un Patrimonio de la Humanidad (1994). Son casi 800 geoglifos tan perfectos y algunos tan complejos que cuesta creer que nuestros antepasados precolombinos los hicieran.
Caño Cristales (Colombia)
Durante el periodo de lluvias el río Caño Cristales, en Colombia, se transforma en un arcoíris. No es fácil llegar a él, pero vale la pena. El embalse adquiere por efectos de luz, plantas y el agua tonos azules, verdes, rojos, púrpura y naranja. El también conocido como río de cinco colores es tan alucinante que fotógrafos y cineastas lo han retratado en sus obras.
Monte Roraima (Venezuela)
Ya de por sí los 2.810 metros de altura del monte Roraima, en Venezuela, dejan a cualquiera sin habla. Las vistas de su cima bordeada por acantilados es tan impresionante que ha inspirado obras literarias y cinematográficas. “La madre de todas las aguas”, como le dicen los indígenas de la zona a este “tepuy”, es una de las montañas más viejas del planeta y los locales la han llenado de leyendas.
Isla de Pascua (Chile)
No será fácil llegar, pero explorar una playa desierta llena de esculturas inmensas y asombrosas justificará la travesía. A unos 3 mil kilómetros de la costa caribe de Chile se halla la Isla de Pascua. Este rincón es famoso por las cabezas y torsos de roca bajo los cuales descansaban cadáveres. El origen de los “moáis” representa un misterio para la humanidad. Lo cierto es que datan de unos 1.500 años y resultan imponentes.
Glaciar Perito Moreno (Argentina)
La Patagonia, en Argentina, es de por sí un destino inolvidable. Sin embargo, hay una experiencia que dejará huella. Ver el Glaciar Perito Moreno. Estas formaciones de hielo impactan a cualquier mortal. La fama mundial del glaciar se debe a que, a diferencia de otros glaciares, este sigue en crecimiento. Este bloque de hielo de cinco kilómetros de frente y 60 metros de alto cede por el agua y continuamente se puede escuchar y ver cómo se desprenden los pedazos de hielo.