Someterse a un tratamiento con aparatos de ortodoncia para alinear los dientes requiere de paciencia y cuidados especiales. Los brackets poseen pequeños agujeros donde puede acumularse la comida (y formar placa dental), creando manchas, lesiones u otros problemas bucales. La higiene debe ser minuciosa para que la salud de las encías y dientes no se vea perjudicada. Aquí te mostramos cómo cuidar de forma correcta tu boca durante el proceso correctivo.
1. Incomodidad inicial
Cuando el aparato es reciente suelen surgir varias molestias. La sensación de incomodidad, de tener algo extraño en la boca, es una de las primeras consecuencias. No haberse acostumbrado aún al aparato también puede generar llagas en las encías, mejillas, labios o lengua. Igualmente, se puede sentir dolor o sensibilidad dental. Por ello se debe consultar al dentista, quien seguramente te recetará un analgésico y/o pomadas que contengan ácido hialurónico, que cicatrizan y protegen la cavidad bucal.
2. Cepillado de los aparatos
Lo primero que deberás hacer antes de cepillarte es retirar todas las partes que se pueden extraer del aparato, como por ejemplo los elásticos o ligas. Luego procede a cepillar alrededor de cada uno de los brackets y alambres en un ángulo de 45 grados. Hazlo de arriba hacia abajo. Procura eliminar todos los restos de comida. Procede con calma y precisión.
3. Cepillado de los dientes
Una vez que hayas limpiado los aparatos de ortodoncia, continúa con el cepillado de los dientes. Limpia diente por diente. Presiona con suavidad y realiza movimientos en círculos. Dedica unos 10 segundos a cada pieza. Pasa el cepillo por la parte exterior e interior de cada diente. La técnica del cepillado debe profundizarse y adaptarse a la nueva situación. Es muy importante que realices este proceso cada vez que ingieras alimentos.
4. Uso del hilo dental
Es fundamental que incluyas en tu rutina de higiene el hilo dental. Al menos debes emplearlo una vez al día. Utilízalo después de cepillarte. Pásalo entre cada diente y evita que se enganche o atore en los frenillos. Al finalizar, enjuaga la boca con un producto comercial específico o con abundante agua. La acumulación de alimentos puede generar mal aliento y placa.
5. Colocar los elásticos
Colocar bien los elásticos o ligas intermaxilares tras los cepillados lleva tiempo. El ortodoncista deberá enseñarte cómo se ponen y tendrás que seguir las instrucciones al pie de la letra. Si los manipulas incorrectamente, pueden romperse y hacerte daño. Igualmente, deberás contar con elásticos de repuesto para cambiarlos con regularidad.
6. Cuida lo que comes
Los aparatos y dientes pueden estropearse si no se vigila la alimentación. Hay ciertas comidas que deben evitarse porque resultan muy duras o son pegajosas y pueden afectar a los frenillos. Hay que evitar los chicles, garbanzos tostados, semillas, hielo, turrones y alimentos que se comen a mordiscos como las manzanas, melocotones, mazorcas y peras.
7. Cumplir con las citas
Es importante que acudas a cada una de las citas que te pauten el ortodoncista y el dentista. En cada consulta te harán una revisión de los aparatos y se realizarán los ajustes necesarios para continuar con el tratamiento. No cumplir con las fechas alargará el proceso y puede estropear el tratamiento. A menudo, las citas son una vez al mes.