La muerte de Helena Rojo ha apenado a los miles de seguidores con los que cuenta no solo en México, sino en otros países del mundo. Y es que ha sido una de las figuras más relevantes del mundo de las telenovelas y el cine latinoamericano.
La aclamada actriz trabajó en producciones como Ramona (2000), Mundo de Fieras (2006) o Corazón Salvaje (2009). Pero Helena no sólo abarcaba papeles en televisión; su brillante actuación la llevó a ganar dos premios Ariel en 1972 y 1981 por Fin de fiesta y Misterio respectivamente. Además, también fue galardonada con un Laurel de oro por el trabajo de toda una carrera, pero en especial por su papel protagónico en la telenovela Amor Real (2004).
La mexicana quiso despedirse de sus fans sin que ellos supieran que lo estaba haciendo. Para ello, publicó un vídeo en sus redes sociales justo antes de Navidad. Helena, fallecida a causa de un cáncer hepático, llevó en absoluto secreto su enfermedad y muy pocos conocían de su delicado estado de salud.
De hecho, en el vídeo aparece con un turbante en la cabeza. Ahora que por desgracia se sabe la verdad, se intuye que llevaba dicho accesorio seguramente para ocultar la pérdida de cabello provocada por el tratamiento.
No se sabe si Helena sabía el poco tiempo que le quedaba en este mundo cuando publicó la felicitación navideña, pero el caso es que el vídeo estuvo repleto de amor y cariño hacia sus seguidores. Incluso leyó alguna de las cartas y mensajes que estos le habían hecho llegar.
Helena tituló su publicación en Instagram como “Sean felices”, a lo que añadió algunos corazones. Esta fue la despedida pública de una gran dama de la interpretación, cuya versatilidad y talento han dejado una marca imborrable en la industria del entretenimiento. Descanse en paz, Helena Rojo.