Desde que empezó a transmitirse en las pantallas de Telecinco y Divinity, ha causado furor. La historia que cuenta “El amor está en el aire” trata un tema universal, los sentimientos humanos. Enmarcada en los hermosos paisajes y exóticas locaciones turcas, las vivencias de sus protagonistas, Eda Yildiz y Serkan Bolat, son parte de un fenómeno mediático en el que las series producidas en Turquía se abren paso en el mundo. Aquí te contamos 6 datos superinteresantes sobre ellas.
El amor está en el aire
El título original es “Sen Çal Kapımı”, que literalmente se traduce en “Tocas (llamas) a mi puerta”. Sus protagonistas son los actores Hande Erçel y Kerem Bürsin. Se estrenó en Turquía en julio de 2020 y está dirigida por Altan Dönmez. La historia, que trata sobre el amor que surge entre una vendedora de flores y un hombre rico, enganchó al público de Latinoamérica y Europa. Lleva unos 38 capítulos y es transmitida con éxito en unos 40 países. Es parte de un fenómeno reciente en la región: el éxito de las series turcas.
Las más populares en España
El público español se ha dejado cautivar por el romance, lo exótico y los conflictos humanos que plantean las series turcas. Son varias las que han contado con una gran popularidad en tierras ibéricas. Además de “El amor está en el aire”, también destacan: “Mujer”, “Mi hija”, “Fatmagül” (en la imagen), “Sila”, “Ciudad cruel”, “Madre”, “Fugitiva”, “Amor de contrabando” y “Herçai”.
Tramas que conectan y son universales
El amor, el sacrificio, trabajo, celos, inseguridades, venganza, traiciones, misterios y aventuras hacen parte de la trama en las series turcas. Estas historias son fáciles de conectar con cualquier espectador, sin importar cultura o religión. Se trata de temas universales que generan sentimientos en el público y que hacen que se identifiquen.
Distancia y química
A diferencia de las telenovelas latinas y los dramas españoles o estadounidenses, la relación que hay entre los personajes de las series turcas va más allá de lo físico. Existe una química entre los actores que se traduce en miradas y acciones. Son más conservadores al mostrar el contacto físico (amoroso), por ello apuestan al lenguaje corporal para transmitir sus pasiones.
Final inesperado
A diferencia de las telenovelas latinas que casi un 100% termina con un final feliz para sus protagonistas, esto no ocurre en las series turcas. Esta situación hace que el público se mantenga a la expectativa y desee continuar viendo la historia. No se vislumbra un claro desenlace y la sorpresa suele estar garantizada.
No son destinadas solo a las amas de casa
Muchas de estas producciones que se podrían catalogar como telenovelas rosa, para los turcos no lo son. De hecho, no tienen un bajo coste (pues adoran grabar en exteriores), se transmiten en horarios exclusivos y no están dirigidas solo a las amas de casa. Los actores más reconocidos del país suelen aceptar sin problemas una participación en estas creaciones. En Turquía se transmiten como una serie, una vez a la semana, aunque los capítulos suelen ser más largos de lo habitual.
