Lidiar con la fama no es una tarea fácil. Son muchos los artistas que se ven sobrepasados por la atención y el dinero. Las consecuencias pueden resultar aún más graves cuando se trata de niños. Dejar a un lado las actividades “normales” de la infancia para asumir grandes responsabilidades y encarar el estrellato puede llegar a destruirlos. Repasamos las vidas de ocho niños que acabaron descarrilando cuando se convirtieron en celebridades.
1. Macaulay Culkin
La fama le llegó a corta edad tras protagonizar la taquillera cinta Solo en casa (Home Alone). Llegó a ser el actor mejor pagado de Hollywood. El divorcio de sus padres y la lucha por su custodia (o por su fortuna) afectó al chico, que en su adolescencia y primeros años de vida adulta se hizo adicto a las drogas. También fue arrestado y hasta hubo rumores de un intento de homicidio. Por fortuna, todo esto quedó atrás y ha encarrilado su vida, convirtiéndose recientemente en padre.
2. Drew Barrymore
Tras su éxito abrumador en el filme E.T., la infancia de Drew quedó sepultada. A los 8 años iba a las discotecas con su madre y a los 11 consumía cocaína y alcohol. Incluso intentó suicidarse. Sus problemas familiares le llevaron a emanciparse a los 14 años. En Hollywood la desterraron y tuvo que limpiar baños para sobrevivir. Tras años de lucha, recuperó su carrera y actualmente es una de las estrellas más queridas de la industria.
3. Lindsay Lohan
Esta estrella pasó de ser una niña inocente y feliz de Disney a una mujer conflictiva. Su vida privada se convirtió en un desastre: los excesos le llevaron a ingresar en numerosas clínicas de rehabilitación y hasta a pasar una temporada en la cárcel. Los altibajos han sido constantes para la actriz.
4. Linda Blair
Tenía 13 años cuando consiguió el papel protagonista en una película icónica del género de terror, El exorcista (1977). El éxito de la cinta fue inmediato y Blair se convirtió en una celebridad. Con apenas 14 años se dejaba ver en fiestas y desarrolló una adicción al alcohol y a las drogas; incluso se convirtió en la amante de un cantante diez años mayor que ella. También pisó la cárcel. Su carrera, por desgracia, cayó en picado.
5. Haley Joel Osment
Alcanzó la fama mundial como el niño que podía ver fantasmas en la película El sexto sentido. Lo nominaron al Óscar y su futuro era prometedor. Sin embargo, al llegar a la adolescencia se descarrió. Fiestas, drogas, alcohol y sobrepeso marcaron su vida. Se alejó de la actuación, aunque actualmente realiza trabajos como productor.
6. Eduardo García
Uno de los niños actores más famosos de España fue Eduardo García. Su papel de Josemi en la serie Aquí no hay quien viva (Antena 3) le granjeó una gran popularidad. Pero no todo era color de rosa en el set. Eduardo, que ahora es rapero, denunció que le explotaron en la televisión. El autoproclamado fumeta, que ahora se hace llamar Dudu, ha asegurado que le robaron su niñez y se aprovecharon de él económicamente.
7. Luis Miguel
La fama del cantante mexicano Luis Miguel llegó cuando sólo tenía 10 años. La reciente serie de Netflix sobre su vida relata los abusos y manipulaciones que sufrió en su niñez. Su padre llegó a darle drogas para que resistiera jornadas maratonianas de presentaciones, conciertos y entrevistas. Las fiestas, el alcohol y las mujeres le llevaron a incurrir en múltiples excesos. A pesar de los conflictos, ha sabido mantener su carrera activa.
8. Amanda Bynes
Esta joven se ganó el cariño del público con sus comedias y papeles en Nickelodeon. La graciosa, talentosa y tierna Amanda entró en decadencia en 2013. Consumió drogas, fue internada en un hospital psiquiátrico y tuvo problemas con la justicia. A raíz de estos incidentes, Bynes quedó fuera de la industria y fue puesta bajo la tutela de sus padres.